Los Fariseos cuestionan al hombre acerca de cómo fue sanado de su ceguedad. El hombre ciego defiende a Jesús como un profeta de Dios, los líderes Judíos lo expulsan de la sinagoga. El hombre acepta a Jesús como el Hijo de Dios. Jesús le dice a Fariseos que se encontraban cerca que son culpables de rechazarlo como Hijo de Dios.